RAMÓN SÁNCHEZ HEREDIA PRESIDENTE DEL COMITÉ DE ENLACE
PROVINCIAL ANDALUCISTA DE CÁDIZ
--Cualquier ciudadano sabe la existencia del Derecho a la Educación, es un derecho que está en nuestras normas básicas del ordenamiento jurídico. Así el Artículo 27 de la Constitución Española de 1978, lo proclama en el párrafo primero, estableciendo a su vez la obligatoriedad y gratuidad de los niveles básicos en el párrafo cuarto, y estableciendo que los Poderes Públicos garantizan a todos y a todas, este derecho. Nuestro Estatuto de Andalucía de 2007, a través de su Artículo 21, viene a reafirmar este derecho y desarrollarlo, así en el párrafo tercero indica que todos tienen derecho a acceder en condiciones de igualdad a los centros educativos sostenidos con fondos públicos y se garantiza la gratuidad de la enseñanza en los niveles obligatorios y, en los términos que establezca la ley, en la educación infantil, en su párrafo cuarto. --La verdad, es que la plasmación en las normas resulta gratificante, sobre todo para los que pensamos que la educación es el elemento fundamental, en una sociedad avanzada, para establecer los diferentes ritmos de desarrollo de los pueblos. La Globalización hace que la Cultura, la Educación y la Formación nos diferencien, pues hoy una empresa lo mismo puede estar en una nación u otra, la diferencia será la formación, la tecnología, la investigación, y demás elementos que supongan una cualificación y unos rasgos específicos diferenciadores.
--La realidad de estas bellas palabras cambian en la práctica, dejan de serlo, nuestro sistema educativo tiene grandes carencias, empezando por los de los valores sociales, como son la autoridad o la honradez, o individuales como es el esfuerzo. Pero no sólo ello, sino también los niveles que los diversos informes que evalúan nuestro sistema, a nivel Europeo, no nos dejan muy bien parados en comparación con otras Comunidades Autónomas o con los Estados Europeos. Esta realidad viene acompañada de unos desajustes en la gestión, donde faltan profesores y sin embargo se gastan grandes cantidades de dinero en pizarras electrónicas enormes, que luego tardan en ponerse en funcionamiento meses, y a las que no se les saca, por falta de otros medios, todo el posible aprovechamiento.
--Frente a esto se quieren establecer criterios economicistas en la Educación, de forma arbitraria, así la Junta de Andalucía trata de hacer desaparecer centros en algunas localidades para agruparlos en otros pueblos. Este es el problema de los padres y madres de niños que estudian en Centros Semi-D (Colegios de primaria que albergan los dos primeros cursos de ESO) de Zahara de la Sierra, Algar, El Gastor y Pedanías de Jerez, como Gibalbín y Torrecera, los cuales tienen que movilizarse cada cierto tiempo para evitar estos agrupamientos, que la Junta periódicamente intenta conseguir para el próximo curso, y que tras las movilizaciones de los padres paralizan para volver a intentarlo el siguiente curso escolar.
--Esta claro, que cuando tenemos que aplicar la norma constitucional y la norma estatutaria Andaluza en zonas rurales ya no todos los Andaluces somos iguales. La Educación no puede estar basada en criterios economicistas, y mucho menos la pública, pues es la garantía de la sociedad en igualdad, cosa que a la hora de gestionar el PSOE olvida aunque esté esbozado de una forma muy bonita en el articulo 21 de nuestra norma autonómica. Por poner un solo ejemplo, que siempre visualizará la discriminación, nos encontramos como las familias en las ciudades tratan de que sus niños y niñas estén lo más cerca de sus domicilios, hablando de distancias bastante cortas entre unos colegios y otros, sin embargo cuando hablamos de desplazar a niños y niñas de una localidad a otra, estamos hablando de kilómetros de distancia, de carretera, y demás circunstancias que todo ello conlleva.
--Los ciudadanos de la Sierra de Cádiz de Zahara de la Sierra, Algar, El Gastor o de cualquier pedanía de Jerez y otras que puedan verse afectadas en nuestra provincia y en otras de Andalucía, tienen los mismos derechos que los que vivimos en ciudades, pero además si tanto estamos hablando de defender el mundo rural, es fundamental para la vida de estas localidades y de otras la existencia de estos centros educativos, son una parte esencial de la vida de estos pueblos. Independientemente de lo anterior, existe el factor sociológico de que si a los niños desde muy pequeños se les va desarraigando de sus propias localidades, estamos haciendo una apuesta de futuro por el envejecimiento del mundo rural.
--Este año ya la Junta de Andalucía ha dado marcha atrás en la agrupación de centros, espero que esta vez sea de manera definitiva y permanente. Ahora que estamos en un momento de crisis, no sólo económica, es cuando más falta hace un mejor sistema educativo que llegue a todos, pues es la única formula de que salgamos verdaderamente adelante y no simplemente nos quede el recurso de la emigración interior o exterior.
